Procura leer despacio.- El leer apresuradamente no sirve cuando nuestro objetivo es el de aprender, es por ello que las investigaciones han podido demostrar que cada uno de los lectores veloces lo hace mucho peor de lo que lo hacen, en cambio a un ritmo pausado se les puede preguntar el contenido del texto, y responderán sin ningún problema.
Consume dos tazas de café.– Se publicó un estudio en el que se hizo un experimento con ratones y se descubrió que la cafeína fortalece las conexiones neuronales. Este experimento que se dio en las ratas, se les dio un equivalente humano de 2 tazas de café, y fue demostrada una actividad eléctrica que era más poderosa dentro de las neuronas en una parte del hipocampo. Esta se vuelve una conexión más fuerte en el área que la implica, se obtiene un mayor aprendizaje y una mejor capacidad de memoria.
Realiza ejercicios, por lo menos tres veces por semana.- El realizar actividades aeróbicas, regula, también estimula la producción de BDNF, esta es una molécula que es responsable de la creación de nuevas neuronas y sinapsis, que es el proceso fisiológico y la base de la inteligencia. Por lo tanto un estudio que fue dirigido por científicos de la Universidad de Illinois de EE.UU, mostró que este proceso incide en un aumento de la materia gris de la región del hipocampo, este se encarga en procesar el conocimiento para así enviarlo a un almacenamiento de permanente de la corteza frontal. Esto en sí mismo no puede asegurar un aumento del coeficiente intelectual, pero sí puede permitir el acumulamiento de conocimiento de manera estable.
Consume más chocolate amargo en tu dieta.– Este método probablemente no tenga un efecto inmediato, pero se ha comprobado que el chocolate, al igual que el vino contiene una muy buena cantidad de flavonoides. A lo que se le considera un poderoso antioxidante, que es la clave del proceso cognitivo, que favorece en la memoria e incluso es capaz de retardar los efectos del declive de la cognición de la tercera edad.
Todo cambio es bueno.– Está tarea nos da una mayor estimulación del cerebro, según un estudio de la Universidad de Hamburgo, que entreno en malabarismo a un grupo de 20 personas durante un mes. Demostró que en solo siete días, vino un considerable aumento de materia gris en el cerebro, pero que retrocedió el aumento cuando se detuvo el entrenamiento, esto se dio a pesar que aún sabían cómo hacer malabarismo.
Procura vencer todos tus temores.– Uno de los peores enemigos del intelecto es el miedo, la amígdala cerebral ya que esta anula el trabajo de la corteza pre frontal, esta se encarga de la memoria de corto plazo y de cada una de las funciones ejecutivas, cuando esto sucede tu coeficiente intelectual se suele desplomar. Toda la creatividad, tu sentido del humor, absolutamente todo se cae.
Apártate de los métodos de tradicionales.– De acuerdo a un experimento de la Universidad de Tufts, se demostró que cuando las personas cambian sus formas tradicionales para la enseñanza de los niños y usan nuevas formas para fortalecer su creatividad, los niños que son sometidos a nuevas enseñanzas empieza a dar mejor resultado que los niños que han aprendido con los métodos tradicionales.
El aprender desordenadamente es lo mejor.– De acuerdo a un estudio de la Universidad de California, se comprobó que las personas recordaban mucho mejor, la información que habían aprendido desordenadamente y de varias fuentes.
Si dominas bien un tema pasa a otro.– De acuerdo a la Universidad de California, se comprobó que cuando aprendemos algo nuevo, hace que exista un aumento de la densidad neuronal de nuestro cerebro, pero este disminuye cuando nos volvemos unos expertos. Por lo tanto la clave sería pasar de una actividad a otra una vez que la hayamos dominado.
Busca el escribir más frecuentemente a mano.– De acuerdo a una reciente investigación de la Universidad de Indiana, demuestra que el usar de nuestras manos para escribir, en vez de usar de un teclado ayuda al aprendizaje, en el 2011, los investigadores sometieron a un grupo de niños a resonancia magnética, para así registrar su actividad cerebral, en este estudio se les mostro letras antes y después, luego de que se les enseñarán sobre ellas, del grupo solo las miraron y otros pudieron practicarlas con su mano, en estos últimos su actividad neuronal era más activa y aún era más parecida a la de los adultos, mientras que los que no la escribieron solo se quedaron sin ninguna actividad neuronal.
